Uno de los elementos más utilizados en la protección contra incendios en Castellón es la pintura intumescente, un tipo de pintura especial con el que se cubre la parte superior de las estructuras metálicas que sustentan las cubiertas, principalmente en las naves industriales. Si se produce un incendio, y las estructuras de sustentación no están suficientemente protegidas, al alcanzarse temperaturas superiores a los 500ºC, el metal empezaría a deformarse y reblandecerse perdiendo su capacidad para sostener el peso de la cubierta de la nave.

La pintura intumescente, reaccionando precisamente ante las altas temperaturas, comienza a expandirse de un modo parecido al que lo hacen las palomitas de maíz, creando una capa ignífuga que sirve como eficaz sistema de protección contra incendios en Castellón. Además, como  la pintura al expandirse aumenta hasta 50 veces su tamaño, crea en su interior una capa de aire que ejerce de aislante evitando que las altas temperaturas del fuego lleguen hasta la estructura metálica.

La aplicación de la pintura intumescente debe realizarse en varias capas así, en el caso de que se produjera un incendio, la espuma producida bastará para impedir el calentamiento y habrá tiempo suficiente para que la intervención de los servicios de extinción de incendios impida que la cubierta se desplome.

La aplicación de pintura intumescente para la protección de las estructuras metálicas se incluye dentro de las medidas que se conocen como protección pasiva contra incendios, esto es, medidas que no sirven para apagar el fuego una vez que se produce, pero que contribuyen a impedir su propagación facilitando con ello las tareas de extinción.

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